A veces… solo a veces… la vida nos atraviesa. Nos golpea en ese rincón donde lo insoportable se hace presente. La angustia se apodera de nosotros, y la mortalidad toma cuerpo, palpable.
Nos perdemos en preguntas cuyas respuestas parecen no llegar, mientras la tristeza nos invita a reflexionar sobre nuestra vulnerabilidad.
A veces… solo a veces… necesitamos creer que lo imposible solo tarda un poco más, aunque en el fondo sabemos que solo lo posible es lo que vendrá.
El miedo a perder nos impide arriesgarnos a ganar. Nos enfrentamos a ese signo universal y, a la vez, tan íntimo que nos asusta encontrar. Saber que algo de la pérdida llegará no es suficiente… perder para ganar, o ganar para perder.
A veces… solo a veces… pasa.
Y solo a veces pasará…
by Gisela Mart.